Pan de viena integral

En mi casa el más panero es mi hijo. Le encanta el pan desde bien pequeñito y siempre había que tener cuidado con él, porque como viera el pan sobre la mesa empezaba a comer trocitos de pan y si la comida tardaba en llegar a la mesa nos quedábamos sin pan.

Recuerdo que un día estaba en casa de mis padres con mi marido y mi niño, que tendría unos dos o tres añitos mas o menos. Yo ayudaba a mi madre en la cocina con la comida, y le digo a mi madre "mama ¿tu ya has puesto la mesa?" me dice sí "¿y el pan?" me dice en la mesa, le digo "pues ya no tenemos pan si está allí el niño ya se lo ha comido", va mi madre y ve que el pan (una barra grande) estaba sobre la mesa  y me dice no, está allí entretenido viendo la tele, pero el pan no lo ha tocado. 

Cuando nos sentamos a la mesa y vamos a coger el pan, en apariencia entero, vamos a cortar un trozo y estaba todo hueco por dentro, había ido metiendo su pequeña manita hasta comerse todo el interior del pan, solo nos había dejado la corteza.

 A él, que es mi especialista en pan, le encanta particularmente el pan integral y yo  si tuviera que elegir entre el pan blanco y el pan integral elegiría, sin duda alguna, el pan integral.

Además de ser mucho más saludable por su aporte en fibra, su sabor es más acentuado, su corteza es crujiente y dorada con miga esponjosa. Por lo que es un tipo de pan que no falta en casa. 

Con esta masa he dado diana, ya que se ha convertido en poco tiempo en mi masa preferida lo mismo me sirve para hacer pan, que unas pizzas o calzones y haga lo que haga el resultado me encanta, ¿para que cambiar?

Pues bien llevaba unos días que me faltaba en casa el pan integral y tenía invitados, pero era fiesta y estaba todo cerrado y los hornos de pan caliente sólo tenían pan blanco y me apetecía comer pan integral y en especial para mi hijo, que se cuanto le gusta. Pues bien encargue a mi marido unas barras de pan blanco y mientras en casa hice unas vienas de pan integral, salieron tan buenas que duraron bien poco en la mesa. A mis invitados y a mi familia les gustó más comer del pan casero integral, por lo que el que compre me quedó practicamente entero.

Por lo que viendo el éxito de este pan pienso hacerlo muy amenudo,además es tan fácil!!

 Para la masa: 

100g de harina de fuerza 

250g de harina integral 

175g de agua 

20g de aceite de oliva 

5g de levadura fresca 

150g de masa madre 

1 pizca de azúcar 

7g de sal 

Amasado a mano: 

Si vamos a hacer la masa a mano, hacemos un volcán con la harina y ponemos en el centro la levadura fresca, la masa madre el agua y añade también el aceite de oliva, la pizca de azúcar y la sal. Comencemos mezclando y llevando la harina hacia el centro con un movimiento circulares. Cuando todos los ingredientes estén mezclados, empezamos a amasar hasta obtener una masa fina, elástica y ligera mente pegajosa, si nos untamos las manos con aceite de oliva nos será más fácil trabajar la masa. 

Con thermomix: 

Ponemos los líquidos en el vaso y programamos 1 minuto 37º velocidad 4 

Añadimos la levadura fresca y la masa madre y la pizca de azúcar 5 segundos velocidad 4 Incorporamos la harina y la sal, 6 segundos a vel. 6 y 2 minuto vaso cerrado velocidad espiga, que veamos que la masa se despegue de las paredes del vaso 

Retiramos la masa del vaso con las manos en aceitadas y sobre una superficie enharinada vamos redondeando la masa, metemos en un recipiente enharinado y tapamos con un paño hasta que doble su volumen. cuando haya doblado el volumen, dividimos la masa en dos y le damos la forma de viena y dejamos que doble su volumen de nuevo (yo la coloco sobre la baguetera). 

Precalentamos el horno (Yo ya lo tenía precalentado pues estaba haciendo un pollo al horno) cuando haya doblado su volumen le hacemos unos cortes y metemos al horno, (tenía bastante vapor como resultado del horneado del pollo) el pan los primeros 20 minutos lo tuve a 180º y en la placa de abajo del horno, y después lo subí a la placa central hasta que lo vi doradito a 200º 

El resultado ¡¡EXPECTACULAR!!