Tarta de crema catalana a la naranja

Esta tarta resulta muy suave y cremosa, con un toque citrico muy especial que realza extraordinariamente su sabor
Esta tarta me conquistó nada más verla, en el blog de Carlos de Mercado calabajío y aunque él mismo le hace una critica con sus pros y sus contras.
Por ejemplo la nata, él aunque la hace con nata de montar, pero ésta tiene más grasa, por lo que para que no resulte tan pesada, aconseja que la hagamos con nata de cocina, ya que ésta sólo tiene un 18% de matería grasa. Así que ateniendome a su consejo yo la he hecho con éste tipo de nata(aunque aún así, es una tarta de la que no hay que pasarse, resulta algo pesada)

La base, que aunque se puede hacer con cualquier tipo de galletas; éstas tipo digestive, con ese toque de naranja, le realza mucho el sabor.
Por otro lado aunque él la base, una vez echa, la deja enfriar sencillamente en el frigo. A mí las bases me guta darle un toque de horno, para darle un toque más crujiente.

Ya eso al gusto de cada cual. como bien dice el refranero popular: "Cada maestrillo tiene su librillo"

INGREDIENTES:
1;200g. de galletas  'Digestive' (Si es posible con sabor a naranja)  
2;80g. de mantequilla a temperatura ambiente

3;350 g de leche

4;1 palo de canela

5; La piel de 1 limón (sin la parte blanca)

6; 1 naranja  (la piel sin las partes blancas y la pulpa sin semillas)

7;400ml de nata con mínimo 30% de grasa

8;6 yemas de huevo

9;1 sobre de gelatina en polvo (10 g)
10;150g. de azúcar

11;40 g  de Maicena
12;1 pellizco de sal

13;100 de azúcar moreno  para quemar

Lo primero que hacemos es preparar la base; para ello molemos las galletas, que aunque bien se puede hacer con cualquier tipo de galletas, estas con toque de naranja le vienen como anillo al dedo. Una vez molidas le añadimos la mantequilla, que previamente hemos puesto para que se diluya en el microondas, sin pasarse. Cogemos un molde desmontable, yo le he puesto en la base un papel vegetal. Y he metido en el horno a 200º durante 10 minutos, pues me gusta más que quede con ese toque crujiente que le aporta el horno. Mientras se hace, ponemos la leche en un cazo y le añadimos a rama de canela, partida, la piel de un limón y de una naranja (muy importante es que no lleve nada de corteza blanca, para que no amargue) En un cuenco, separamos las claras de las yemas. Le añadimos el azúcar a las yemas... removemos bien, hasta que quede todo muy bien integrado. A continuación, le vamos integrando la harina de maicena, poco a poco. Y mezclamos bien batiéndolo todo, con la varilla. Colamos, nuestro preparado de leche y ponemos el liquido resultante de nuevo en el cazo, a fuego muy suave. Exprimimos zumo de una naranja; que también colaremos, y le añadiremos el sobre de gelatina, integrándolo todo muy bien. Volvemos a nuestra crema de yema y azúcar, a la cual le añadimos la nata, que ha de ser de cocina, para que resulte más ligera. Una vez todo bien ligado, le añadimos la crema a la leche, que manteníamos al fuego bajo, subiéndole la temperatura. Y a continuación, también le incorporamos el zumo en el que habíamos diluido el sobre de gelatina. Ahora, no podemos dejar de mover, es muy importante que no se agarre abajo, ni que le salgan grumos y cuando rompa a hervir retiramos del fuego. y extendemos sobre nuestra base de galletas y dejamos enfriar en el frigo. Está mejor de un día para otro, cuando vayamos a consumir y desmoldamos nuestra tarta; es el momento de espolvorear toda ella con azúcar moreno y quema con el soplete, si no tenemos soplete, sencillamente gratinamos un poco en el horno.